CAPÍTULO 3
Contrariamente
a mis expectativas de que fugarnos supondría una ceremonia furtiva. Yoochun y Junsu
nos costearon la fuga; fue su regalo de bodas para Siwon y para mí.
Después de
haber dejado bien claro que se oponía a mi matrimonio con Siwon, papá llevó a
la práctica su amenaza de cortar cualquier clase de relación conmigo. Nada de
dinero, nada de comunicaciones. «Ya se le pasará», me dijeron mis hermanos,
pero yo les respondí en un tono de lo más categórico que no tenía ningunas
ganas de que se le pasara, que estaba harto de papá y sus mil formas de
controlarme la vida.