martes, 17 de febrero de 2015

The Vampire: Capítulo 4

Capítulo 4


Anoche. El ataque. Yunho.
¿Había soñado todo? ¿O realmente Yunho, ahora mismo, estaba durmiendo en el sofá-cama del estudio? Me moví para mirar el reloj, haciendo una mueca por el dolor en todo mi cuerpo. Me quité de encima las sábanas y vi moretones en mis brazos donde Shi Il me había agarrado. Era toda la garantía que necesitaba para creer que la noche anterior había ocurrido.
7:39am. Mi segundo sábado despertándome demasiado temprano. Pero no había ninguna posibilidad de volverme a dormir. Me sorprendió que incluso durmiese porque había permanecido despierto durante horas, mi mente girando.
Agarré unos pantalones vaqueros y una camiseta de punto, poco a poco tirando la ropa sobre mi cuerpo dolorido. Después de cepillarme los dientes, fui a mi tocador para cepillar mi pelo. Miré a mí alrededor. Como siempre, mi habitación estaba sucia, rebosante de libros. Un signo colgaba de mi puerta:
Las mentes creativas rara vez son ordenadas.
Aún así, agarré los calcetines y camisetas dispersos y los metí en mi cesto de ropa sucia. ¿Qué estaba haciendo? Un hombre de Otherworld nunca entraría al dormitorio de un chico. Sería arruinar su reputación.
Mi cara ardió.
El apartamento estaba en silencio. Mamá y Si Wan aún dormían, se quedaban en sus camas hasta tarde los sábados. Miré en el estudio, y vi que las sábanas y la almohada estaban dobladas junto al sofá. Oí un ruido en la cocina, así que me dirigí hacia allí.
Y encontré a Yunho sentado en la mesa de la cocina con una taza de té, absorto en Otherworld.
Me miró.
—Buenos días, Jae.
Escuchar mi nombre pronunciado con su voz suave y profunda era sorprendente.
— ¿Dormiste bien? —pregunté, tratando de calmarme.
—No dormí. Salí con la esperanza de recuperar su rastro. Luego, al amanecer, regresé y empecé a leer. Espero que no te importe que agarrara tus llaves.
—Está bien. —Vi que mis llaves estaban en la mesa junto a la puerta, donde las había dejado. Debería haber sabido que Yunho era alguien de la noche, como un vampiro. Era lógico, si era un cazador de vampiros. No lo había oído salir o regresar, pero el sigilo siempre había sido uno de sus fuertes.
—Duermo por las tardes —explicó Yunho—. Pero entonces, supongo que ya lo sabes. Sabes mucho sobre mí. —Su boca se apretó—. Parece que no hay detalle de mi vida demasiado pequeño que Jo Dal Hwan no compartiera con el mundo.
Logré una sonrisa.
—Eso es lo que hace a Otherworld tan fascinante. Los detalles.
—Estoy seguro de que Dal Hwan estaría encantado de tu aprobación.
— ¿Por dónde estuviste anoche?
—Por toda tu ciudad. Fue algo divertido. Algunas calles tienen los mismos nombres que en mi mundo, otras son diferentes. Algunas de las áreas son iguales, otras son completamente diferentes. Voy a tener que estudiar un mapa antes de salir de nuevo esta noche. —Con eso, él dirigió su atención al libro.
Vi un plato con migajas de pan y el plato de mantequilla frente a él. Ayer por la noche, le había dicho que él se tendría que hacer de desayunar, pero no estaba seguro que pan y mantequilla fuera gran cosa.
—Voy a hacernos huevos.
—No te preocupes. Ya tuve mi sustento.
—Voy a hacerte unos de cualquier forma. —Sentí que necesitaba algo más sustancial que un simple desayuno.
Decidí que huevos revueltos con salsa de tomate y queso era lo que iba a preparar, puse un sartén en la estufa y saqué los ingredientes de la nevera. No era una chef gourmet, pero sabía cocinar. Con mamá teniendo tantos turnos irregulares mientras crecía, a menudo no había nada para comer o cenar, y papá era feliz dándonos hot-dogs y frijoles pre-horneados.
Eché una mirada por encima del hombro. ¡Jung Yunho está en mi cocina! Me iba tomar algún tiempo acostumbrarme. Traía su camisa blanca arremangada, y sus largas piernas estaban estiradas frente a él, abrazadas por un par de anticuados pantalones caqui. Era hermoso, más de lo que había imaginado. Traté de sacar el pensamiento de mi cabeza. Fantasear con un tipo ficticio era una cosa; fantasear con él cuando estaba sentado a sólo unos metros era completamente otra. Rápidamente él lo iba a averiguar si seguía mirándolo así.
Cuando terminé de hacer los huevos, los dividí en dos platos, coloqué uno delante de él.
—Gracias. Es muy amable de tu parte.
—De nada. —Sabía que lo más probable era que se sentiría obligado a invitarme a sentar, pero no quería interrumpir su lectura, así que dije:
—Voy a comer en la otra habitación para que puedas leer. —Antes de que pudiera discutir, entré en la sala de estar.
Me senté en el sofá y le cambié al canal de noticias locales. Un periodista con los ojos hinchados estaba en la escena del crimen. Cinta amarilla bloqueaba un parque detrás él.
—Dos adolescentes fueron encontrados muertos en una cancha de baloncesto en el parque, al parecer con marcas de dientes en el cuello. La policía no está dando información, Jane, pero creo que están atónitos. Nunca se había visto algo igual.
Oh, Dios. Puse la cara entre mis manos. Esto no podía estar pasando, ¿verdad? ¿Shi Il estaba causando un alboroto en mi ciudad? Y yo casi había sido su víctima.
Mis tripas se retorcieron. Apostaba que él había matado a esos pobres chicos después de que Yunho había frustrado su ataque contra mí. No había llamado a la policía anoche. Tal vez debería haberlo hecho. ¿Pusieron algún tipo de advertencia? ¿Han impuesto no más juegos de baloncesto nocturnos?
El sofá se hundió a mi lado mientras Yunho se sentaba, su oscura mirada fija en el televisor.
— ¿Está, como, en vivo?
Asentí con la cabeza.
Vi la arruga entre sus cejas profundizarse al escuchar la noticia de los asesinatos. Si había tenido alguna duda de que Yunho era quien dijo que era, o que mi atacante anoche había sido Shi Il, ya no más.
Yunho había estado tan cerca de capturar a Shi Il al final de The Mists que había tenido a los lectores al borde. ¿Pero iba a ser capaz de lograrlo en una ciudad que no conocía?
—Voy a necesitar excelentes mapas de la ciudad —dijo Yunho, sus ojos sin apartarse de la televisión—. Esquemas de túneles subterráneos y sistemas de alcantarillado son esenciales.
— ¿No crees que deberías tomar un par de días para conocer los alrededores? —pregunté—. Si no conoces el lugar, podría voltearse en tu contra.
—Shi Il no conoce la ciudad, tampoco. No tiene sus escondites habituales, ni la protección de su aquelarre. —Él tomó una respiración—. Esta podría ser la oportunidad que he estado esperando.
Yunho tenía razón. Y aunque tenía miedo por su seguridad, también tenía miedo de todo el mundo en esta ciudad. Nadie sabía que había un vampiro de verdad estaba vagando.
—Te voy a conseguir mapas. Y algo de ropa, también. Para que no llames la atención.
—Te agradezco la ayuda y hospitalidad. —Se volvió hacia mí, sus ojos con una escalofriante determinación—. Te aseguro que haré cuanto esté en mi poder para detener a Shi Il antes de que pueda causar más terror. No quiero que tu mundo se vuelva como el mío.
Yo tampoco.

 * * *

Una hora más tarde, Jung Yunho entró en el centro comercial llevando mi camiseta, sus propios pantalones y botas altas de cuero. La moda impar le consiguió algunas miradas, y estaba ansioso para que se cambiara de una vez. Sin embargo el atuendo inusual no lo hacía menos atractivo, y podría decir que muchas de las miradas eran de mujeres intrigadas.
Mientras Yunho y yo nos dirigíamos hacia una tienda en el extremo sur del centro comercial miré a mí alrededor, esperando no encontrarme con alguien conocido de la escuela. Afortunadamente, Junsu y Tae Gun estaban ocupados con obligaciones familiares. Y eran justo después de las 9 am y el centro comercial estaba medio vacío. Pero aún así estaba paranoico.
Yunho también estaba mirando a su alrededor, pero sus ojos estaban muy abiertos y parecían casi abrumadores.
—Esto definitivamente no es mi mundo —dijo—. Nunca he visto nada así. Tantas luces y colores. Es vertiginoso.
— ¿Hay centros comerciales en el tuyo? —No podía recordar si mencionaban alguno en los libros.
—Hay centros comerciales de diversa índole. Ninguno tan colosal como este. Y todos están iluminados con luz natural, por obvias razones. —Él miró hacia el tragaluz enorme—. ¿Hay partes de esta plaza que no se expongan a la luz natural?
—Creo que sí. Hay un montón de bodegas en el sótano y también está el estacionamiento subterráneo.
La mirada de Yunho se volvió preocupada.
—Durante la luz del día Shi Il podría estar paseando.
La idea me hizo estremecer. A pesar de que estábamos en la planta baja con mucha luz natural, me encontré mirando por encima de mi hombro.
—Hay un montón de lugares donde podría moverse durante el día. Centros comerciales, cines, edificios. Y hay kilómetros de túneles subterráneos de metro por toda la ciudad.
Yunho asintió con la cabeza, mirando determinado.
—Terminemos las compras, Jae, para que pueda estudiar los mapas.
Cuando llegamos a la tienda departamental, Yunho miró a su alrededor con asombro otra vez.
—Es una amplia selección de... todo —dijo, viendo los pasillos llenos de mercancía—. ¿Cómo se elige?
Le mostré algunos pantalones de chandal, dijo que se veían ridículos. Supuse que la gente no los usaba en el mundo de Otherworld. Pero cuando le dije que eran para correr, estuvo dispuesto a probárselos. Le ofrecí algunos pantalones de color caqui que aprobó. Luego tomó unas camisetas, una sudadera, una chaqueta, calcetines y artículos de higiene personal.
—Voy a encontrar una manera de pagarte —dijo después de salir de la tienda con nuestras compras. Sabía que era difícil para él dejarme comprar estas cosas, pero no tenía elección. Hasta que conociera mejor mi mundo, tenía que confiar en mí.
—Me has salvado la vida, y estás tratando de proteger a mi ciudad. Es lo menos que puedo hacer —le dije con sinceridad.
—Estoy, no obstante, agradecido. —Él se frotó la sien, como si las luces le dieran dolor de cabeza—. ¿Ya nos vamos?
—Una cosa más. Creo que deberías tener unas zapatillas deportivas. —Miró a sus botas de cuero maltratadas.
—Mis botas están bien.
—Tal vez, pero vamos a echar un vistazo. —Nos encaminamos a una tienda deportiva y lo llevé a la sección de zapatillas deportivas, donde decenas de opciones estaban exhibidas en las paredes.
Yunho tomó unos cross trainer de Nike.
—El diseño es extraño.
— ¿Por qué no te los pruebas? Puede que te sean más cómodos que tus botas.
—Este zapato claramente no es de mi tamaño, y no hay tiempo para que hagan uno.
Traté de no reírme.
—Ellos tienen más en el cuarto de atrás, seguramente hay de tu tamaño —le expliqué. Era divertido las cosas que dábamos por sentado en nuestra vida diaria.
Un vendedor se acercó, preguntando si queríamos que trajera de algún número.
—Va a probarse unos, pero no está seguro de su número —respondí por él—. ¿Podría medir sus pies?
Yunho se vio sometido a que le midieran los pies, y luego esperó en calcetines a que el vendedor trajera las zapatillas. Se las puso y caminó unos pocos pasos.
—No son tan malos, en lo absoluto. Se sienten como si estuviera caminando sobre malvaviscos. Gracias, Jae, pero mis botas están bien.
Una vez más, contuve la risa.
—Se llaman zapatillas deportivas. Te ayudarán a correr aún más rápido de lo que puedes.
— ¿Más rápido? —Eso llamó su atención. Dio un salto hacia arriba y abajo varias veces para probarlas—. Nada mal.
No estaba interesado en la etiqueta de precio de cien dólares, cualquier cosa que pudiera ayudar a Yunho en su búsqueda de Shi Il valdría la pena.
Yunho se cambió de ropa en el baño del centro comercial. Cuando llegamos a casa, eran las once y media. Por suerte, Si Wan aún no se había levantado, y mamá había dejado una nota diciendo que había salido al supermercado, lo que podría tomar un tiempo. Hice una búsqueda rápida en Internet y descargué todos los mapas de la ciudad que encontré, luego los imprimí. Yunho los extendió en la mesa de la cocina y los estudió, preguntándome al mismo tiempo. Él quería que le describiera las diferentes partes de la ciudad, lugares de interés, topografía, todo. Pensé que conocía bien mi ciudad, pero no fui capaz de darle toda la información que quería. Sin embargo, me metí a investigar en Internet varias veces.
En un momento dado, Si Wan apareció en la puerta de la cocina, soñoliento y con una llamativa pijama.
— ¿Quién es ese? —me preguntó, mirando a Yunho.
Si Wan, no es que no hayas aprendido modales, pensé irritado, simplemente no los usas.
—Él es mi amigo Yunho. Se quedará con nosotros durante un par de días.
— ¿Alojarse aquí? ¿Por qué?
Yunho levantó la vista de los mapas, su mirada fría.
— ¿Y quién eres tú?
Pareció desconcertado.
—Si Wan.
— ¿Si Wan? —repitió, como si no le gustara.
—Si — dije.
—Ya veo —dijo con una inclinación de cabeza.
— ¿Tienes un problema con mi nombre o algo así? —le preguntó Si Wan con suspicacia.
—No. —Él se quedó perplejo—. ¿Y ? —Cuando Si Wan no respondió de inmediato, volvió su atención a los mapas, efectivamente ignorándolo.
Si Wan hizo una mueca, luego agarró una caja de galletas y se retiró. Lo seguí hasta la sala de estar.
— ¿Quién es ese tipo? —exigió—. ¿Y por qué tiene que estar aquí?
—Él es un amigo de un amigo y necesita un lugar donde quedarse. Por favor, se amable con él. —Si mamá iba a dejar a Yunho quedarse aquí, era necesario que Si Wan estuviera de acuerdo.
—Yo siempre soy lindo. —Tomó un bocado de sus galletas—. Él fue totalmente grosero.
—No tenía la intención de serlo. Sólo llegaste en un mal momento. Él trabaja de noche y no ha ido a la cama todavía.
— ¿No ha ido a la cama todavía? Es una locura. ¿Dónde trabaja?
Pensé rápido.
—En una tienda 24hrs.
— ¿24hrs, en serio? ¿Es que no va a la escuela? Él se ve de la edad de un universitario.
Si Wan era muy prejuicioso. Y estaba en contra de estudiar.
—No sé cuáles son sus planes —le contesté.
Si Wan me lanzó una mirada.
—Es guapo, sabes.
Decidí ignorar eso. Si Wan se dejó caer en el sofá y encendió la televisión. Las noticias locales seguían informando sobre los adolescentes asesinados. Si Wan escuchó con la boca abierta.
— ¿Viste? —Si Wan se volvió para mirarme—. Algún loco anda por ahí matando a la gente, pretendiendo ser un vampiro. Es por todos esos libros que leen los que no tienen una vida.
—No sé —le respondí calmadamente. Si sólo Si Wan supiera cuán estrechamente ligados a los libros estaban los asesinatos.
»Pero de todos modos —agregué—, debemos ser cuidadosos. Obviamente alguien peligroso anda suelto.
—Wow, qué miedo —dijo a la ligera, pero me di cuenta que la noticia le había afectado—. Voy a tomar una ducha.
Apagó el televisor, y se fue a su cuarto. Cuando volví la cabeza, Yunho estaba de pie allí. Tenía los mapas enrollados en sus manos como un pergamino.
—Tu hermano es un espécimen interesante. —Por su tono, me di cuenta que no era un cumplido. Si Wan tenía una manera de poner a la gente en su contra.
—Si Wan está pasando por una fase. Una larga fase.
—Sus modales son insuficientes. A diferencia tuya.
—Gracias —le dije, ocultando mi sonrisa—. Si Wan puede ser muy molesto. Trato de no dejar que me moleste.
— ¿Has tenido éxito?
—No siempre. Ha sido mucho peor desde que mi padre se fue.
— ¿Tu padre se fue? ¿A la guerra?
Casi me reí.
—No, nada noble. Se fue un día después de haberle dicho a mi mamá que estaba viendo a otra mujer.
Yunho silbó entre dientes.
—Lo que él hizo es impensable. Conozco a pocos hombres que harían una cosa así. Las mujeres u hombres y niños nunca deben estar sin un hombre que los proteja y vea por ellos.
Me encrespé, pero luego recordé de dónde venía Yunho, literalmente.
—Es diferente aquí. No necesitamos la protección de un hombre. Una gran cantidad de hombres, y también mujeres, dejan a sus familias y comienzan otras nuevas. Las palabras «hasta que la muerte nos separe» no han sido seguidas desde hace mucho.
Yunho frunció el ceño.
—Es una píldora difícil de tragar.
—Sí.
—Tu padre parece ser un canalla de primer orden.
La palabra «canalla» era común en Otherworld. Significaba «idiota».
—No creo que haya hecho nada malo. Dice que no tenía la intención de enamorarse de alguien más. De todos modos, no hay ningún punto en discutir con él. Cuando lo molesto, no sé de él durante semanas. —Me sorprendió lo natural que se sentía confiar en Yunho, como si lo conociera desde hace mucho tiempo.
—Eso es por la culpa de él —dijo Yunho, pensativo.
—Tal vez. No lo sé.
—Yo lo sé, Jae. Porque he lastimado a personas, y odiaba mirarlos a los ojos.
Sabía de quién estaba hablando.
—La tía Hyun Joo.
—Sí. Mi único pesar es la decepción que le causé. Ella era una mujer extraordinaria.
Me mordí el labio, preguntándome si ya había leído la escena en la noche en que Hyun Joo está en su lecho de muerte. Le dice a Yoochun que ella falló en salvar a Yunho porque no había sido capaz de romper su obsesión con Shi Il y ayudar a construirle una vida para sí mismo. Murió con tristeza.
Sentí un nudo en la garganta. Lloré cuando Hyun Joo murió. Se podía sentir su calidez y bondad irradiando de las páginas. Ahora que sabía que Hyun Joo había sido una persona real, era aún más triste.
—Espero que no te moleste que sepa mucho de tu vida —le dije.
Yunho ladeó su cabeza.
—Me molesta que ese tal Dal Hwan haya compartido tantas cosas sin mi permiso. Pero no tengo ningún problema con que tú lo sepas. Has sido más que generoso y unido conmigo. Estoy en deuda contigo.
—No, no lo estás. Al contrario, yo lo estoy contigo.
—Voy a discutir el punto en otro momento. En este momento, debo dormir.
—Por supuesto. —Él necesitaba descansar si iba a cazar esta noche. Rápidamente preparé el sofá-cama por él en el estudio, y cerré la puerta para darle privacidad.
Cuando fui a mi habitación, me pregunté cómo Yunho encontraría a Shi Il. A pesar de que Shi Il no tenía sus escondites favoritos, podía fácilmente encontrar nuevos. Mi mundo ofrecía más y mejores escondites que los húmedos, oscuros sótanos y las alcantarillas de Otherworld. Aquí cada edificio principal tenía un sótano o estacionamiento con iluminación artificial. Shi Il podría ocultarse en la comodidad de miles de lugares en toda la ciudad.
Si tan sólo pudiera advertir al público de que la amenaza era mucho peor de lo que sabían... Entonces se me ocurrió que había algo que realmente podía hacer. Tenía la descripción del asesino, ¿no? Podía llamar a Crime Stoppers.
Tomé mi celular y marqué.
—Tengo información del asesino vampiro.
—Continúe —dijo una mujer con voz nasal.
—Sé cómo se ve el asesino. Él me atacó anoche, pero escapó. Actuaba como un vampiro. —Por mucho que quería decirle que era un vampiro de verdad, no había manera de que me creyera—. Incluso se puso colmillos.
— ¿Dice que lo atacó?
—Sí.
—Nos gustaría que fuera a hablar con la policía inmediatamente.
—No puedo. Tengo demasiado miedo. —Escuché a mi voz vacilar con el miedo real—. Le voy a decir cómo se ve. Es todo lo que puedo hacer. Tiene cabello rubio plateado —acordé con la descripción vívida de los libros—. Ojos oscuros y piel muy pálida. De altura media, creo. Es muy fuerte, pero no lo supondrías si lo vieras. Es muy flacucho.
—Gracias. Espero que reconsidere ir y hablar con los investigadores. Puedo garantizar su anonimato. Parece que tiene suficiente información para serles útil.
—Por favor, sólo tiene que pasar esta información.
—Lo haré, pero ya hemos recibido cientos de llamadas sobre este caso, y para el final del día, podríamos tener miles. Si usted no se siente cómodo hablando con los investigadores, ¿me puede dar más pruebas que lo corroboren? ¿En qué parte de la ciudad le atacó?
—El lado este. Cerca de un parque agradable.
— ¿Cuándo?
—Viernes por la noche.
— ¿A qué hora?
—Alrededor de las once.
—Está bien. Gracias por llamar a Crime Stoppers.
Colgué y tomé una respiración profunda. Lo más seguro era que no me había creído ni una palabra. Cientos de personas estaban llamando y dando la descripción de alguien que vagaba por las calles o de sus ex-novios.

Me sentía impotente. Tenía la esperanza de que Yunho atrapara a Shi Il, porque si no lo hacía, la ciudad no tenía ni idea de lo que le esperaba. 

8 comentarios:

  1. wow las cosas se van poniendo mas tenebrosas ahora que ese malvado ha aparecido en la ciudad... claro sabemos que Yunho de seguro intentará localizarlo y acabar con él pero eso va a ser difícil y lo mas probable es que tengan que sufrir mucho antes de que eso suceda.

    Ademas solo han pasado horas desde que Shi il ha aparecido y ya ha matado a dos personas :( supongo que deberé esperar para saber como continua....
    Gracias por compartir este capitulo, estaré esperando la continuación.

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  2. espero y si lo atrape yunho pronto no se le ocurra a ese regresar por jae y no este yunho para salvarlo de nuevo y ahora si lo lastime mas
    Gracias sigo

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  3. las cosas se les estan complicando para ambos con Shi il suelto por la ciudad
    ojala que la llamada de jae ayude y no le valla a complicar la búsqueda de yunho x3 asdadad esta genial gracias x la actu! espero el sig con ansias ^^

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  4. Oh todo es ta extraño para Yunho, ji ji ji, lo amo es tan lindo, pero me aterra lo que el vampiro maloso este haciendo.

    Gracias

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  5. sera un caos la ciuda con Shi il pero si esto acaba Yunho se iria con el, como podria destruir a Shi il, solo con matarlo desapareceria o es algo como inmortal ya que salio de un libro lo mismo digo por Yunho si lo mata tendra cuerpo.

    gracias por la actu

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  6. Cielos! Eso será un caos, ya que efectivamente éste mundo ofrecía una mejor calidad de vida para alguien como Shi Il, una donde nadie creía en los vampiros y él pudiese andar a sus anchas. Ahora todo depende de Yunho y su asistente JaeJoong. Me pregunto qué pasará cuando se encuentren, ojala YunHo sea capaz de detenerlo antes de que comience una masacre.
    Gracias por compartir!
    Pd. Yo también fantasearia si tuvier a Jung Yunho en mi cocina... o cualquier parte de mi casa XD

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  7. Vaya...el caos se desatara....conti plis.....

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  8. Oohhh amé éste ff! En general me gusta la temática de vampiros xd espero que lo puedas continuar al igual que los otros! Los leo todos!! ☺😄😁
    Kai.

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