viernes, 17 de febrero de 2017

El conquistador: Capítulo 5


Capítulo 5

 
Él siempre tenía el mismo sueño cuando estaba ansioso o con miedo. Y ese sueño vino a atormentarlo esa noche.

Él era un niño de siete años, parado en las escaleras  de la  fortaleza,  pestañeando por  la  brillante luz del sol matutina. Podía oír los sonidos de las risas infantiles, los chillidos y los  gritos, y Jaejoong sonrió ante esos sonidos alegres, se daba vuelta para  localizar su fuente.  Veía un grupo de niños y niñas, de su propia edad y hasta doce años, todos niños conocidos de la aldea con quienes él había crecido. Su medio hermano, Karam, dos años  mayor que él, jugaba con ellos.

Jaejoong levantó sus faldas y corría hacia ellos. Rápidamente se metió en el juego. Un niño llamado Redric era el gallito ciego, y Jaejoong quería evitar tocar sus manos extendidas, en medio de los gritos y las risas.


En medio de la confusión,  él chocó con Karam y lo hizo caer al pasto. Karam gritaba, y todos se detenían para reunirse alrededor de él y ver la herida en su rodilla.

Jaejoong inmediatamente se sentía arrepentido.

—Lo siento, Karam, yo no...

— ¡Tú me empujaste!

—Yo  no quise...

— ¡Él me empujó!

—Karam— Redric dijo, siendo el más grande, de casi trece años, fue un accidente. — Déjame  ayudarte.

Los  ojos de Karam se llenaban de lágrimas.

— ¿Quién te pidió que jugaras?

Jaejoong sintió una puñalada familiar y retrocedió un paso.

— Iré a buscar a  la abuela —  él se ofreció, queriendo ayudar a Karam, deseando con todo su corazón no haber lastimado a su hermano, desesperadamente queriendo hacer lo correcto. El único problema era que nunca sería lo correcto, porque Karam parecía odiarlo.

— ¡No!—Karam gritó. — ¡Mi mamá dice que ella es una bruja, y no aceptaré que esa bruja me toque!

Ahí estaba la palabra odiada, y Jaejoong se sentía tensarse interiormente. Era una palabra que él había oído susurrar alrededor de él para toda su vida. Por confusión y por miedo,  él siempre había cerrado sus oídos a ese insulto.

—Ella no es una bruja— Jaejoong logró decir.

— Mi mamá dice eso, todos dicen eso — Karam gritó. Los niños que habían jugado con  ellos comenzaron a moverse incómodamente, y había un murmullo de acuerdo.

—Mi mamá dice lo mismo — dijo una niña dijo rápidamente.

Karam se puso de pie.

—Vete, Jaejoong. Tú no puedes jugar con nosotros.

Jaejoong no se movía, pero sentía que un rubor lento subía a su rostro. Él le lanzaba  una mirada a los otros.

—Él puede jugar — Redric dijo. —Vamos comenzar nuevamente.

Los niños se dispersaban.

— ¡Yo no jugaré con un brujo!— Karam gritó.

Jaejoong se congeló. Él parpadeó azorado mirando a su hermano, no entendiendo, seguro de que había oído mal. Karam lo burlaba.

— ¡Brujo!

Jaejoong dobló sus brazos sobre su pecho.

—No lo soy.

— ¡Brujo! ¡Todos dicen eso! ¡Brujo!

Jaejoong estaba  por  llorar. Karam no quería decir eso. No era verdad. Él luchó por retener las lágrimas. Los niños estaban mirándolo fijamente, algunos con curiosidad, pero Redric y una niña con incomodidad. Un silencio largo descendió en el lugar, luego  Redric lo rompió.

—No  es verdad, — él decidió.

Una niña, también de doce años, lo miró. 

—Oí  eso también. Tal vez no deberíamos dejarlo jugar con nosotros.

Jaejoong miró al suelo. 

—No lo soy — él logró decir. Lágrimas calientes ardían en sus ojos. Pero podía oír la palabra repetida por Karam, un eco familiar, tan familiar como atemorizante. Estaba asustado. Él miró hacia arriba, secando sus ojos.

Jaejoong despertó.

Su corazón estaba latiendo violentamente, y sintió el calor de un rubor intenso. Como siempre, había lágrimas en sus ojos, lágrimas, él supuso, por el primer contacto de un  niño con una cruda y dolorosa realidad. Pues el sueño no sólo era una pesadilla, había sucedido, exactamente como él lo soñaba.

Y después de eso, los niños se habían alejado de él. Ellos no dejaban que él se uniese a sus juegos, y si él lo intentaba, ellos dejaban de jugar y se dispersaban. Y entonces allí estaba Karam, siempre lanzando ese insulto vil, lanzándoselo a la cara.

— ¡Brujo!

Jaejoong se sentó. Él deseó que su padre todavía estuviese vivo. Podía recordarse  corriendo hacia él llorando, y cuando él lo había alzado acunándolo en sus brazos, él le había implorado saber la verdad.

— ¿soy un brujo, Papá?  ¿Verdad que no?

Él había vacilado. Jaejoong se había aferrado a él, esperando lo peor, de repente sabiendo que eso era verdad.

—No,  mi dulce — él había dicho,  levantando su mentón. —No eres un brujo, y no dejaré  que nadie te haga pensar lo contrario.

Los instintos de un niño son tal vez más precisos que los de un adulto, sin estar afectados por ideas preconcebidas, y Jaejoong había presentido el tumulto emocional de su padre, su falta de seguridad. No había sido calmado. No había sido tranquilizado.  Había quedado más confundido que nunca. Era una dura realidad para que un niño enfrentase, pero todos lo consideraban un brujo.

Jaejoong no sabía si era verdad o no. Se había aferrado obstinadamente a la negación de  su padre, y había comenzado a evitar a los otros niños, quienes, rápidamente se habían sometido al liderazgo de Karam, pues ellos también  temían ser rotulados cruelmente por él. Jaejoong había pasado más tiempo con su abuela, ayudándola a preparar sus mezclas  curativas, y había pasado  mucho tiempo solo, en el bosque o en los establos, siempre con el nuevo perro de caza favorito de Yoochun, quien se había convertido su compañero fiel y constante.

El tiempo cura todas las heridas, y Jaejoong adaptó a su nueva condición. La persecución  de sus pares había cesado cuando ellos se habían convertido en adultos jóvenes, cuando se fueron casando, formando sus familias, y asumiendo las responsabilidades como siervos del lord. Jaejoong se había convertido tan experto como su abuela en el arte de curar, y era muy requerido. Era tratado con una mezcla de temor, nerviosismo, y familiaridad que era también amigable. Y entonces su padre había decidido que era el momento que él se casase, y había comenzado a buscar un marido para él.

Entonces la vida le había dado otro golpe, otra fea realidad para enfrentar. Jaejoong había  sobrevivido a eso también, de la misma manera que ahora sobreviviría a esto. Él levantó y giró hacia la puerta de la tienda, que admitía los primeros rayos de sol del amanecer.  Realizó sus abluciones matutinas usando una  fuente con agua que le habían dejado, luego   salió.

El hombre de guardia inmediatamente dio un paso al costado, dando una mirada apurada en su dirección. Jaejoong lo ignoró, habiendo  aguantado ese tipo de comportamiento  toda su vida y por los recuerdos frescos de su sueño. Él miró a los normandos levantar el  campamento. Y, como un  metal atraído por un imán, él se encontró mirándolo.

Yunho estaba en una profunda discusión con Changmin, el caballero al que Jaejoong le había dado poción la noche anterior. Pero su mirada estaba focalizada en él.

Jaejoong sintió la inundación inmediata de recuerdos. Como Yunho lo había aprisionado en su abrazo, con su fuerza superior probando su dominio sobre él, su castigo, un beso  feroz y caliente. Dios Santo, Jaejoong había reaccionado tan lamentablemente como una liebre acorralada y atemorizada. Jaejoong se endureció con el recuerdo, rabia y agitación hicieron hervir su sangre. Si  él se atreviese a tocarlo nuevamente, le arrancaría los ojos. Y esa vez él no erraría su objetivo Jaejoong se estremeció, mirándolo nuevamente.

Yunho no sonrió, pero abruptamente, comenzó a caminar con pasos largos hacia él. Jaejoong sintió que se paralizaba. 

No quería que Yunho lo abordase. No quería conversar con él, ni siquiera verlo. Pero no podía moverse. Y ahora estaba siendo asaltado con preocupaciones.

Ellos estaban cerca de su destino, que normalmente era su santuario. Karam vendría a saludarlos, y Yunho descubriría su engaño. Jaejoong sabía que él era, como cualquier hombre, orgulloso, y no tomaría de un modo leve el haber sido engañado. Se sentiría humillado y enojado por haber hecho el papel de idiota. Claro que sabía que su rabia disminuiría, pues se sentiría aliviado de tener que casarse con Karam, y no con él. Pero  hasta que Yunho se calmase, ¿él estaría en peligro?

¿Y cómo él podría ayudar a su hermano a evitar el casamiento con ese hombre?

¿Y qué sucedería con sus hermanos? ¿Yunho sabía algo? Jaejoong se dio cuenta que él conocería a sus hermanos más que cualquier otro, pues estaba muy cerca de Siwon el Conquistador, pero ¿cómo podría él ganarse su benevolencia para atreverse a preguntarle  y estar seguro de recibir la verdad como respuesta?  Él era tan astuto, seguramente cuando notase que él estaba desesperado por noticias de sus hermanos, Yunho usaría su posición como un factor de poder sobre él. Y sin embargo tenía que preguntarle porque se estaba  muriendo por saber algo  cualquier cosa de sus hermanos.

Yunho hizo una pausa delante de él,  sus  ojos cafés estudiaron su rostro.

— ¿Pasaste por una buena noche?

Y Jaejoong podía sentir sus mejillas ruborizándose.

—Si…

—Vacilas. Tal vez... — él sonrió — no dormiste bien. ¿Tal vez tus sueños estuvieron  poblados conmigo?— ¡Nunca le preguntaría nada a ese hombre arrogante!

—Dormí muy bien.

Yunho lo estudió. Su mirada se movió hacia su boca.

—Entonces te envidio.

Su intención era clara. Jaejoong se ruborizó profundamente.

Yunho abruptamente giró.

—Partiremos en media hora.
Jaejoong observó  su espalda, sus hombros anchos, sus estrechas caderas. No era lo que  él había pensado, Yunho no había querido decir lo que Jaejoong había interpretado. ¿O sí?

3 comentarios:

  1. pobre sito Jae desde chiquito siempre lo han rechazado espero que ese Karam se quede sin Yunho
    ahora que Yunho a probado a Jae se case con el por que después de conocer a Jae dudo que se quiera casar con otro que no sea Jae
    espero que Yunho no este muy molesto con Jae por lo que le hizo a Min al fin que eso dio motivo a que se acerque mas a Jae y de paso probar sus labios y eso a de tener a Yunho en vela por recordar el sabor de Jae y supongo que lo a de desear mas que antes
    estoy segura que después de ese beso Yunho estará mas sobre Jae y espero que eso sirva para que Jae sepa algo de sus hermanos si no por Yunho por Min
    Gracias

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  2. Muchas gracias por actualizar ❤
    Estaba esperando 😁
    Pobre jae que feo crecer rechazado por sus hermanos : (
    Gracias por el capi 😍

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  3. Pues ojala que si, que Jae le haya robado el sueño😁😁😁

    Que malo y cruel es Karam con Jae, se ve que desde niños le tiene celos y envidia.

    Gracias!!! 💗💕💞

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