Capítulo 28
Yunho hizo una pausa en la entrada del
establo, intentando escrutar la oscuridad del interior. Levantó una lámpara y
lo vio. Jaejoong estaba sentado sobre un
fardo de heno, su cabello suelto y cayendo hasta sus caderas. Estaba
esperándolo. Él sonrió.
Jaejoong le sonrió en respuesta.
Yunho avanzó, consciente de necesidad para
apresurarse. Urgentemente lo envolvió en sus
brazos; Jaejoong protestó.
—Mi lord, nos prenderás fuego!
Él se rió maliciosamente y colgó la lámpara
de óleo. Él retornó y lo aplastó contra su cuerpo, buscando su boca ferozmente
y posesivamente. Jaejoong se entregó con
igual fervor. Pasó mucho tiempo antes
que ellos pudieran tomar aire.
—Parece como si no nos hubiésemos visto por días,— Jaejoong logró
decir, acariciando su cuello.
—Desde el amanecer hasta el crepúsculo es
bastante tiempo — Yunho dijo. —No puedo esperar un
minuto más, Jaejoong. — Tomándolo por sus nalgas él lo apretó rudamente
contra su miembro.
—Ni yo —
Jaejoong replicó, recorriendo audazmente con su mano su miembro erecto.
El acoplamiento fue
rápido y feroz, sobre la paja, y
posteriormente yacieron jadeando y con los cuerpos entrelazados. Yunho comenzó
a desvestirlo.
—Quiero sentirte desnudo contra mí.
—Sí— Jaejoong murmuró, ayudándolo a quitar
las prendas. Jaejoong se acurrucó contra él.
—Changmin parte para Dumstanbrough mañana —Yunho le dijo. —Para
construir su fortaleza. Le dí una
licencia de quince días.
—Lo sé, él
me lo dijo.
— Qué más te dijo?— Yunho preguntó.
—Nada.
— No preguntó
por tu paradero anoche?
—No — Jaejoong dijo indecisamente. —Me siento
culpable, mi lord, aunque sé que él estuvo con Lettie.
—Cuando él vuelva — Yunho dijo, acariciándole el
brazo —me ocuparé de esa situación, te lo prometo.
Jaejoong quería preguntarle cómo lo haría,
pero tenía miedo de saber lo que él planeaba. Y realmente, qué podía hacer?
Podría pedirle a Changmin para que aceptase anular el matrimonio, o podría pedirle que mantenga las relaciones tan
castas como eran ahora. Ciertamente Yunho no iba
a divorciarse de su propio esposo y casarse con él. Cuando Jaejoong se
dio cuenta la dirección que sus pensamientos tomaban, se quedó atónito. Seguramente él nunca aceptaría casarse con
el normando, aunque ambos fuesen libres. Él era el enemigo! El podría
despertar sus pasiones, pero él sólo era su amante para ayudar a sus hermanos y no debía olvidar eso ni por un segundo.
— Karam...— él hizo una pausa —... Karam comentó algo sobre lo de anoche? él sabe
que estuvimos juntos?
—No lo sé — Yunho dijo. — Karam está confinado en su habitación por lo que te hizo, Jaejoong.
Estoy harto de su maldad, le advertí que cesase con sus complots. Espero que se
haya dado cuenta que estoy siendo muy indulgente.
—Hiciste eso por mí?— Jaejoong jadeó.
— Por Quién más?— él dijo secamente. —él casi
te mató!
—Pero lo encerraste antes que yo fuese a tu cama
anoche.
—El modo en que él te trata no tiene nada que ver con nuestra relación, y mi
castigo para él es independiente de eso
también. — Él sonrió. —Ahora sería peor, porque te he marcado en mi mente y en mi corazón, y soy
muy posesivo y territorial, Jaejoong. cualquiera que dañe a vos ahora me daña a
mí.
—No quiero que Karam sepa que me convertí en
tu amante, — él susurró. —Por favor.
—Piensas que soy tan cruel como para lanzarse
eso a su cara?— él se endureció.
—Él lo descubrirá, — Jaejoong dijo con tristeza. —Aunque
nadie me vio salir del
cuarto esa mañana, eventualmente esto se
sabrá. Los secretos no pueden ser mantenidos en una fortaleza.
—No
importa. Yo soy el lord aquí, y nadie se atreverá a hablar en contra tuya
por miedo a mi ira. — De repente él sonrió. —Sólo vos te atreves a
enfrentarme, Jaejoong.
—Los brujos no le tienen miedo a los
mortales. — él murmuró.
Yunho se rió con ganas.
—Silencio — Jaejoong murmuró, colocando su
mano sobre su boca. — O nos descubrirán!
—Brujo — él dijo afectuosamente, todavía riéndose. —Todos están dormido, nadie nos puede oír, nadie excepto las ratas y los caballos.
—Era una rata lo que se apretó contra mi
muslo un momento atrás? Yo pensé que eras vos, pero me pareció muy pequeño.
Yunho sonrió
nuevamente, rodando sobre su espalda y colocándola para que lo montase.
—Si era pequeño, sabes que no podía ser yo. —
Él colocó su mano en la base su miembro.
—Arrogante — él jadeó. —Tu lanza no es tan
grande.
—Suficientemente grande como para hacerte implorar por clemencia, gemir de
placer, y gritar mi nombre!
—Yo hice todas esas cosas, mi lord?
—Todas, — él dijo pícaramente.
—Y piensas que se debe a esto?— él agarró su miembro.
El tono arrogante desapareció. Yunho jadeó.
— Sé que se debe a eso.
—Arrogante
también — Jaejoong dijo, deslizando
su palma por la extensión de su
falo.
— No estarás
hablando sobre... — Yunho logró decir —tu lord. Jaejoong... no tiene
ningún respeto?
Jaejoong frotó su pene en su pecho y contra
sus pezones. Yunho jadeó.
— Esto es suficiente respeto, mi lord?— Había
presunción en su tono jadeante.
—Aprendes demasiado rápido, brujo, — él dijo,
moviéndolo y empalándolo en un solo movimiento. —Ahora quién tiene el control?
— Vos. —
Jaejoong jadeó mientras se movía. — Vos.
* * *
Yunho estaba distraído.
Estaba sentado sobre su caballo en el campo,
sabiendo que Beltain le había hecho una pregunta pero
su mirada seguía a Jaejoong
mientras él se movía por el camino y luego iba dirección
del huerto. Era al día siguiente, por la tarde. A dónde estaba yendo el
muchacho?
—Mi lord, debemos comenzar?— Beltain repitió.
—Sí, sí,— Yunho dijo impacientemente. Jaejoong desapareció de su visión entre los
árboles y el pastizal alto. —Estás a cargo — él le dijo a Beltain, luego
espoleó su caballo en dirección al
huerto.
Una vez adentro, él frenó el caballo,
buscándolo. Jaejoong no estaba a la vista. Qué estaría haciendo? él se
preguntó, no con sospecha, sino con curiosidad. No había señales de él, aunque sabía que él tenía que estar allí.
Espoleó su caballo para avanzar, su mirada
vagando y buscando.
—Jaejoong?
No hubo ninguna respuesta.
Sintió una puntada de preocupación. No podía
haber desaparecido. Una terrible idea se le ocurrió. Él se había escondido a
propósito, tal vez para encontrarse con un espía? O se había
tropezado y caído, golpeándose la cabeza? Su tono se hizo más agudo.
—Jaejoong? Jaejoong!
Ninguna respuesta. Cabalgó
más rápido, casi llegando al final del
huerto. Podía ver el bosque
del otro lado del camino. A menos que él
hubiese corrido, no podía haber cruzado
el huerto y había desaparecido en
el bosque tan rápidamente. Tal vez Jaejoong
había comenzado a correr una vez que se
había escapado de su visión. Sintió miedo. Jaejoong no estaba
tramando nada bueno...
Una risa sonó.
Era suave como la suya,
conocía ese sonido musical y mágico. El
alivio lo invadió. Yunho giró su cabeza.
—Jaejoong? Por Dios! muchacho, estás jugando
conmigo? Dónde estás?
Otro vez la risa, y luego algo lo golpeó en
la cabeza y se partió al medio. No lo
lastimó; era una manzana. Pasmado, Yunho desvió su mirada hacia la copa de un árbol encima de él.
Jaejoong le sonrió desde arriba.
—Me has seguido, mi lord?— él preguntó
serenamente.
Jaejoong era una imagen impresionante de miel y oro sobre el árbol, y por un momento él no pudo responder.
Yunho fingió enojo.
— Qué estás
haciendo allá arriba, Jaejoong?
—Buscando manzanas, por supuesto — él dijo
dulcemente. —Te gustaría otra ?— Antes
que pudiera responder, él le lanzó otra manzana. Yunho la esquivó.
Incrédulo, lo miró fijamente.
— Qué diablos estás haciendo?
—Buscando manzanas — él insistió, sonriendo.
—Por qué me has seguido?
—Por qué crees?— él murmuró. —Vos mandas, y
yo te sigo!
Jaejoong se rió, complacido con su
comentario.
—No dejes que eso se te suba a la cabeza, y
no me lances mas manzana!
—Bien —
Jaejoong concordó.
Yunho vio una pantorrilla desnuda y expuesta
porque sus faldas eran subidas hasta su cintura.
—Baja!, — él dijo.
Jaejoong levantó una ceja.
—Mas no he acabado.
—Baja! — él repitió, su tono sensual y
persuasivo.
—Si me quieres, tendrás que subir y
buscarme — Jaejoong gritó, y
trepó más alto en el árbol.
—Estás loco?— él dijo. —ese árbol no puede
soportar tu peso!
—Si me quieres — Jaejoong dijo, y dio una mirada provocativa, —entonces
tendrás que venir a buscarme, mi lord!
Entonces, sonriendo se izó a
sí mismo en el árbol. La rama crujió. Sin asustarse, trepó más alto, agarrando su delgado tobillo. Jaejoong lo eludió hábilmente y, con velocidad de una ardilla, Jaejoong
se bajo fácilmente. Jaejoong se estaba
riendo de su asombro, e hizo una pausa debajo de él, poniendo las manos en sus
caderas.
—Pareces un tonto en ese árbol, mi lord, y se
está por partir en dos!
Jaejoong comenzó a correr en el segundo
que él saltó al suelo. Yunho corrió
detrás de él. Él casi lo alcanzó, Jaejoong
lo eludió, había un árbol entre ellos.
Yunho estaba sonriendo. Fingió ya no estar interesado en atraparlo.
Entonces Jaejoong se movió, y él lo agarró con un grito triunfal.
—Suéltame! — Jaejoong gritó
mientras él lo levantaba en sus
brazos y lo hacía girar en el aire.
—Pero te gustan las alturas — él dijo con
ingenuidad. — Esto no es suficientemente alto
para vos?
—Suéltame! — Jaejoong lloró, pero se estaba
riendo.
—Nunca — él respondió, y lo apretó contra su
pecho. Jaejoong enlazó sus brazos
alrededor su cuello. —Qué clase de juego era ese, Jaejoong?— él preguntó
roncamente.
—Un juego divertido — él dijo simplemente. —No te divertiste?
Yunho gruñó, secretamente había disfrutado esa
travesura infantil.
—Me divertí — él dijo, y le mordió el mentón,
luego tomó su boca con pasión.
—Me tomarás aquí?— Jaejoong jadeó
mientras él se arrodillaba, colocándolo sobre el suelo.
—Aquí, ahora, en el suelo — él dijo,
—Cómo te quería hacer desde el
momento en que te vi por primera vez.
* * *
Era de noche, y ellos se encontraron en el
establo. Yunho estaba completamente relajado. Es demasiado guapo, él pensó, y
su corazón se hinchó tanto que le dolió. Yunho lo miró.
—Por qué me miras tan fijamente?— él
preguntó, su mano fue hacia su cabello.
— Es lindo
mirarte, mi lord — él dijo
audazmente. —Eres una visión que le corta
la respiración a cualquiera. Por
supuesto que sabes eso.
Él sonrió.
—Me consideras guapo, en verdad?
—sabes que si, eres una continua distracción.
—Bien — él dijo, acariciando su cabello y jugueteando con su oreja. —entonces estamos
empatados, porque yo no puedo dejar de pensar en vos.
Sus palabras le causaron placer
y Jaejoong rozó su nariz en su pecho. Cómo podía estar tan complacido? En el fondo de su mente una voz surgió. Esto no es real, su
voz interna dijo. Lo estás seduciendo con un propósito, no olvides eso!
Jaejoong quería olvidarlo. Cuando él había
aceptado convertirse en su amante, nunca había soñado que sería así; Nunca
había soñado que Yunho sería de esa manera. Oh, sí, era arrogante y era
autocrático, podía ser severo y exigente, pero también podía ser infinitamente
gentil. Jaejoong sabía que ya no lo
odiaba. De hecho, apenas podía pensar en otra cosa que no fuera él, su corazón se aceleraba con sólo pensar
en él, y ante la mera la imagen de Yunho. También había descubierto
que él quería estar en su cama, entre sus brazos, y en ningún otro lugar.
No pensaría en el futuro,
Jaejoong decidió, y por el
momento fingiría que esa cosa entre ellos eran real, pura y sin ser
motivado por cuestiones políticas y deslealtades.
Distraídamente estaba acariciando su brazo.
—Mi lord? Nunca te aburres?
Él sonrió ligeramente.
—Aburrirme? Te parece que estoy aburrido esta noche? No estás satisfecho? Si es así eso puede ser inmediatamente remediado. — Su mano
bajó desde su cabeza hasta sus nalgas.
Jaejoong agarró su mano, deteniéndolo.
—Estoy muy satisfecho, mi lord. En serio.
—En serio? Pero me tuviste todo el tiempo jugando juegos — él dijo, y le
pellizcó la oreja. —Con vos.
Jaejoong apartó su mandíbula.
—no quiero
jugar juegos ahora. En verdad te pregunto, no estás aburrido?
Yunho se sentó, colocándolo en su
regazo.
—De qué se trata esto?
—No quieres... — Jaejoong dijo cautelosamente, con el corazón
bombeando furiosamente, —... buscar a una mujer? Tal vez Lettie, o Beth ?— Jaejoong lo miró.
—Quieres hacer un trío?
Jaejoong le golpeó el brazo.
—Sabes
que no! Por favor... — y su tono
era de ansiedad —Dime la verdad.
Su sonrisa se debilitó.
—No estoy aburrido, Jaejoong, no de vos. No
quiero estar con Lettie o Beth, ni con ninguna otra. Te quiero vos.
Su corazón se sobresaltó. Se sentía alegre y
no podía contenerse. Estaba radiante.
—Eso te agrada?— él preguntó, su dedo pulgar
localizó su mandíbula.
Jaejoong bajó los ojos.
—Sí.
Yunho lo movió abruptamente, entonces él
estaba entre sus rodillas montado sobre su regazo.
—Me gusta agradarte, Jaejoong — él dijo en
voz baja. —Me gusta el modo
en que me has mirado esta noche.
Su miembro estaba hinchándose nuevamente, y
su punta lo rozó.
—Nuevamente?—
Jaejoong jadeó.
—Deseo probarte que no estoy aburrido, — él
dijo.
Owwwww tanta felicidad parece sospechosa :(
ResponderEliminarQue cosas malas vendran :(
Muchas gracias por el cap ❤
ya se a enamorado Jae de Yunho también así como el Yunho de Jae ahora que ara para no traicionar ni a sus hermanos ni a Yunho estará en aprietos y el Karam que ara por que no creo que se quede quieto por que lo cambio Yunho por Jae y a el lo encerró en su lugar
ResponderEliminarGracias
Karam espero no les haga daño cuando descubra que ya son amantes. Que pasará con los hermanos de Jae.
ResponderEliminarGracias!!! 💗💕💞